En Joyería Torrico, la tradición familiar desde 1965 nos exige estar siempre un paso por delante, no solo creando el presente, sino anticipando el futuro del lujo. Aunque el calendario aún marca 2025, nuestra visión ya está fijada en la sofisticación y audacia que definirán el 2026. Nuestras piezas de joyería de lujo son un espejo de las corrientes estéticas que dominarán los próximos meses. Le invitamos a una transición de estilo y a explorar piezas que ya encapsulan el espíritu del mañana. A continuación, descubra las cinco tendencias clave que marcarán el camino de la joyería de lujo a lo largo del año.
1. El fin del minimalismo, vuelven las joyas grandes con impacto
Después de una temporada en la que dominaron las piezas sutiles y geométricas, el foco se mueve de forma decisiva hacia lo grande y lo espectacular. En 2026, la joya ya no es un simple detalle; es el centro de atención. Hablamos de diseños con volumen y una presencia notable que celebra el gusto por lo visible. Lo que se busca es el efecto “wow”, esa pieza que cuenta una historia de lujo a primera vista. No se trata solo de tamaño, sino de la actitud: la confianza de llevar una auténtica joya de arte.
La esencia de esta vuelta al esplendor la encontramos en nuestro collar de oro rosa de 18 quilates con motivos de lunas, corazones y estrellas con pavé de diamantes. Esta pieza, además de ser versátil, añadirá una explosión de luz a su día a día.
2. Combinar metales en la misma joya
Hubo un tiempo en el que mezclar metales se consideraba un error de estilo. Sin embargo, el futuro abraza la dualidad, el diálogo sofisticado entre el oro blanco —frío y moderno— y el oro amarillo —cálido y clásico—, o incluso el oro rosa. Esta combinación en una misma pieza no es indecisión, sino una muestra de maestría en el diseño e increíble versatilidad. Permite que la joya combine con todos los colores de su armario además de favorecer cualquier subtono de piel. En 2026, esta mezcla es intencional y busca crear contrastes visuales dinámicos que reflejan las riquezas del lujo contemporáneo.
El mejor ejemplo de esta tendencia de fusión es nuestra pulsera de círculos en oro blanco y amarillo con diamantes en talla brillante. Esta pulsera usa dos tonos de oro de 18 quilates con círculos entrelazados, realzados por casi ocho quilates de diamantes. Es una pieza audaz, que eleva el diseño a un nivel superior de elegancia.
3. Perlas modernas
La perla, con su belleza natural, ha dejado atrás su fama de ser solo para ocasiones muy formales. En 2026, vuelve con un aire fresco y moderno, lejos del collar clásico. La perla se lleva de forma asimétrica, mezclada con diamantes y metales atrevidos, a menudo en variedades especiales como la perla australiana. Se valora la belleza natural, la perfección orgánica que se desvía de la simetría estricta. Esta renovación da a la perla un toque actual, ideal para la mujer que ama la elegancia atemporal pero quiere un aire renovado.
Una muestra perfecta de esta reinterpretación es la pulsera media caña de DEALTO. Su diseño de media caña en oro blanco abraza una perla australiana de brillo impecable, destacada por su sutil pavé de diamantes en talla brillante de 0.28 quilates. Es una pieza que integra la nobleza de la perla en una joya moderna y muy ponible.
4. Diamantes de colores
Aunque el diamante incoloro es insuperable, la pasión por los diamantes de color está aumentando. Tonos como el amarillo canario, el rosa y el auge del diamante negro o coñac ofrecen una paleta única para quienes buscan exclusividad. Su gran valor reside en su rareza y en la intensidad de su color, lo que convierte cada pieza en una inversión y declaración artística. Esta tendencia permite jugar con contrastes y profundidades que el diamante blanco no ofrece. Es el placer de poseer algo escaso, una pieza con inigualable distinción.
El contraste más sofisticado se ve en este anillo con diamantes negros y blancos. Esta sortija juega con la luz y la sombra, donde el brillo clásico de los diamantes incoloros se encuentra con la profundidad enigmática de los de color negro. Con un total de más de seis quilates, esta joya es la definición de una tendencia audaz y llena de impacto.
5. Joyas con piedras de color
Además de los diamantes, la alta joyería en 2026 se dejará seducir por la belleza de las grandes gemas de color. Zafiros azules, rubíes y esmeraldas seguirán siendo esenciales, pero veremos un foco especial en gemas como el zafiro rosa, la turmalina Paraíba o el ópalo. Se prioriza el uso de piedras con tallas llamativas —cojín, esmeralda, etc.— y colores excepcionalmente intensos. Estas piezas son elegidas por clientes que buscan coleccionar belleza y rareza. La gema de color es el nuevo amuleto y reflejo de una personalidad vibrante que no teme ser el centro de todas las miradas.
La elegancia y la riqueza de color se unen en nuestros pendientes con zafiro rosa y diamantes en oro blanco. Estos pendientes capturan a la perfección la tendencia al presentar un zafiro rosa de un color profundo, enmarcado y realzado por el brillo atemporal de los diamantes en oro blanco. Son la prueba de cómo una gema de color puede transformar una joya en un accesorio de alta costura, aportando luz y un toque de feminidad único.
El futuro de la joyería de lujo para 2026 nos invita a expresarnos sin límites. En nuestras vitrinas encontrará la vanguardia: la opulencia de los grandes volúmenes, la riqueza cromática de las gemas vibrantes y la modernidad de las perlas reinterpretadas. Son las joyas que marcarán la pauta y le prepararán para recibir el 2026 con un estilo inigualable. En Joyería Torrico, celebramos esta evolución que apuesta por la grandeza, la mezcla de materiales y el color como los nuevos elementos de estilo. Le invitamos a descubrir nuestra cuidada selección de joyas de lujo, compuesta por piezas en tendencia y diseños exclusivos que además, son una inversión en su estilo personal y un legado para el futuro. Visítenos en nuestra joyería en Salamanca o explore nuestro catálogo online de alta joyería. El 2026 es el año para iniciar su colección, le esperamos.
