Corría el año 1965 cuando Luis Torrico Rubio, nacido en Béjar, emprende lo que sería la aventura más bonita de su vida: fundar Torrico Joyeros, una joyería dedicada a la alta joyería y alta relojería en la que la tradición joyera se ve reflejada colección tras colección.
Con diseños propios y firmas que consolidan su posición como joyería de referencia en la zona oeste de España, Torrico elige la Plaza Mayor de Salamanca como marco insuperable en el que ofrecer a sus clientes el mejor servicio.
Luis Torrico Rubio inculca a sus hijos Luis y Alberto la pasión por la joyería y el trato exquisito al cliente. Con el cambio generacional, Torrico Joyeros vuelve a impulsar la joyería tradicional de la firma con colecciones que aúnan diseño y modernidad con la elegancia y sutileza de la tradicional forma de laborar de Torrico.
Luis y Alberto marcan nuevas metas para la joyería: atender a un mayor número de clientes de forma totalmente personalizada, ya sea en tienda o en domicilio y ampliar el ámbito geográfico de servicio, atendiendo peticiones de cualquier punto de España o del extranjero.
A día de hoy, la satisfacción del trabajo bien realizado tanto en taller como en tienda es la mayor recompensa que Torrico Joyeros puede disfrutar.